Muchas personas evitan hacer los ejercicios abdominales tradicionales por el dolor que provocan en la espalda y el cuello de los principiantes. Se necesitan meses de práctica y entrenamiento para aprender a realizarlas con la técnica correcta y conseguir así los resultados deseados sin dolor.
Afortunadamente, existe una alternativa más segura e igualmente eficaz: los abdominales invertidos. Se trata de una variación de los ejercicios abdominales clásicos, que reduce la carga y la tensión en las zonas mencionadas. Es una alternativa perfecta si estás empezando a abrirte a la actividad física.
Los abdominales invertidos son similares a los ejercicios abdominales clásicos, pero en este caso son las piernas y la pelvis las que realizan el movimiento activo, mientras que la espalda permanece total o parcialmente estática y apoyada en el suelo.
Al hacer abdominales invertidos, se entrena principalmente el músculo recto del abdomen, es decir, el músculo que se encuentra en el centro y que forma el conocido «six pack«. Al incluir variaciones del ejercicio en tu rutina, también puedes activar otros músculos, como el transverso y los oblicuos del abdomen.
El clásico ejercicio de abdominales invertidos se realiza así:
1️⃣ Túmbate en el suelo boca abajo, con las piernas flexionadas como si quisieras realizar un ejercicio abdominal clásico.
2️⃣ Coloca los brazos a los lados, con las palmas apoyadas en la superficie del suelo. Relaja los hombros y la espalda, mirando hacia arriba.
3️⃣ Dobla las rodillas y llévalas hacia el pecho. Realiza este movimiento sin levantar la espalda y sin mover demasiado la pelvis.
4️⃣ Aprieta los músculos abdominales mientras lo realizas.
5️⃣ Permanece en esta posición durante un segundo, y luego vuelve lentamente a la posición inicial.
✅ Repite el ejercicio entre 10 y 20 veces.
Ahora que ya sabes cómo realizar un ejercicio abdominal invertido, añádelo a tu rutina de entrenamiento como alternativa a los ejercicios clásicos.