Cómo el ejercicio mejora las relaciones sexuales

Todos sabemos que el ejercicio es bueno para la salud: mantiene el corazón sano, puede ayudarle a alcanzar y mantener un peso saludable e incluso puede añadir años a su vida.

La actividad física hace que su corazón bombee y mejore la circulación, ayuda a su cuerpo a estar más ágil y flexible, y mejora su resistencia. Estos beneficios le permiten realizar sus actividades diarias con mayor facilidad. Pero el ejercicio puede hacer algo más: mejorar su vida sexual.

Hacer ejercicio, ya sea una sola sesión o una práctica regular, puede mejorar su vida sexual. Los científicos han relacionado resultados específicos relacionados con el ejercicio con diversos aspectos de la función sexual.

Y la investigación continúa; los científicos siguen encontrando nuevas formas en las que la actividad física puede ayudarle a disfrutar de una vida sexual más sana y satisfactoria. Siga leyendo para conocer estos beneficios.

Puede mejorar la imagen corporal

Gran parte de las relaciones sexuales consisten en sentirse bien con el propio cuerpo. Los estudios han confirmado que la imagen corporal está fuertemente ligada a la satisfacción sexual, especialmente entre las mujeres.

Las investigaciones demuestran que la imagen corporal está profundamente relacionada con la salud sexual de las mujeres. Las mujeres con una imagen corporal positiva tienen una mayor función sexual, incluido el deseo sexual, que las que tienen una imagen corporal negativa.

Los investigadores descubrieron que la satisfacción con la forma del cuerpo es un factor predictivo de la función sexual. El atractivo percibido puede ser esencial cuando es probable que se produzcan cambios corporales en la mediana edad.

Hay menos estudios sobre la imagen corporal y la satisfacción sexual en los hombres. No obstante, al menos un informe publicado reveló que las actitudes negativas hacia el aspecto físico se asocian a experiencias sexuales adversas.

Los sentimientos de atractivo percibido están relacionados con la satisfacción sexual, por lo que una forma de mejorar su vida sexual puede ser trabajar en su imagen corporal. El ejercicio puede ayudar a sentirse más deseable independientemente de los cambios en la apariencia.

Un estudio publicado en 2017 en el que participaron 60 mujeres adultas jóvenes indicó que solo una sesión de ejercicio de 30 minutos puede mejorar la imagen corporal en las mujeres.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que utilizar el ejercicio para intentar controlar la forma de tu cuerpo y desarrollar una relación obsesiva y poco saludable con el ejercicio puede dañar la autoestima y la imagen corporal. Sé consciente de cómo el ejercicio te hace sentir con respecto a tu cuerpo. No debe ser un castigo, sino un estímulo y una recompensa.

Puede reducir la disfunción sexual

Un estudio a gran escala en el que participaron 3.906 hombres y 2.264 mujeres investigó cómo el ejercicio podría afectar a los índices de disfunción sexual autodeclarada, como la insatisfacción con el orgasmo y la dificultad para excitarse en las mujeres y la disfunción eréctil en los hombres. El informe concluyó que el ejercicio cardiovascular semanal puede proporcionar algunos beneficios preventivos.

Los resultados mostraron que los niveles más elevados de ejercicio cardiovascular en adultos físicamente activos se asociaban con una menor disfunción sexual autodeclarada. Los autores del estudio sugirieron que los hombres y las mujeres con riesgo de disfunción sexual podrían beneficiarse de un ejercicio más riguroso, independientemente de su nivel de actividad actual.

Puede reducir la disfunción eréctil

Los problemas circulatorios suelen causar disfunción eréctil (DE). Para tener una erección, el pene debe hincharse con sangre. Las arterias obstruidas, la hipertensión y otros problemas cardiovasculares pueden interferir en ese proceso. La Asociación Americana de Urología cita la falta de ejercicio como una causa potencial de DE.

Los autores de una revisión de investigación publicada en 2018 desarrollaron recomendaciones con respecto a la actividad física para disminuir la DE. Sugirieron que los hombres con la afección completen 40 minutos de ejercicio aeróbico moderado a vigoroso supervisado cuatro veces por semana.

Como recomendación a largo plazo, esos mismos investigadores escribieron que el ejercicio semanal de 160 minutos durante seis meses contribuye a disminuir los problemas eréctiles en hombres con DE causada por inactividad física, obesidad, hipertensión, síndrome metabólico y/o enfermedades cardiovasculares.

Puede mejorar la excitación en las mujeres

Hay algunas pruebas de que el ejercicio puede ayudar a estimular la excitación tanto a corto como a largo plazo, al menos en las mujeres. Una revisión de investigación publicada en 2018 encontró mejoras en la excitación sexual fisiológica después de una sola sesión de ejercicio.

Los científicos sugirieron que los cambios parecían estar impulsados por aumentos en la actividad del sistema nervioso simpático y factores hormonales. Añadieron que un programa de ejercicio regular probablemente mejora la satisfacción sexual indirectamente al beneficiar la salud cardiovascular y el estado de ánimo.

El ejercicio de atención plena también puede ayudar a mejorar la excitación sexual en las mujeres. Las investigaciones demuestran que la práctica de ejercicios basados en la atención plena, la concentración en las sensaciones físicas y las tareas de imaginación mental mejoran la excitación sexual subjetiva.

Puede reducir los síntomas de la menopausia

La disminución de los niveles de estrógeno durante la menopausia produce síntomas que pueden perjudicar la calidad de vida, afectando a la salud física, mental y sexual. Más concretamente, la menopausia puede afectar a las relaciones sexuales al alterar los sistemas biológicos implicados en las respuestas sexuales normales.

Los autores de una revisión de la investigación publicada en 2020 descubrieron que ciertos tipos de ejercicio tenían más probabilidades de ser útiles durante esta etapa de transición. Ejercitar los músculos del suelo pélvico y los ejercicios cuerpo-mente pueden ser beneficiosos para controlar los síntomas de la menopausia. No hay pruebas suficientes para saber si el ejercicio aeróbico y el entrenamiento de fuerza benefician a esta zona.

Otras investigaciones sugieren que la actividad física, en general, puede ayudar a aliviar problemas específicos como la sequedad vaginal, los sofocos y los sudores nocturnos.

El ejercicio favorece el aumento del flujo sanguíneo en todas partes, incluidos los genitales. En la menopausia, esto puede contribuir a mejorar la experiencia sexual.

Puede mejorar el envejecimiento sexual

Los estudios demuestran que el ejercicio puede ayudar a preservar la salud sexual a lo largo del proceso de envejecimiento. Este beneficio puede ser especialmente significativo en los hombres.

Los investigadores de los Institutos Nacionales del Envejecimiento (NIA) han identificado cómo el ejercicio puede ayudar a mantener la salud sexual. Enumeran los problemas articulares como una posible causa del aumento de los problemas sexuales. La organización sugiere que el ejercicio puede ayudar a disminuir las molestias causadas por la artritis.

La NIA también enumera las enfermedades cardíacas, la diabetes, los accidentes cerebrovasculares y la depresión como factores causales que pueden contribuir a los problemas sexuales. Se sabe que el ejercicio reduce el riesgo de padecer estas enfermedades crónicas.

Unas palabras de Conocer Salud

Si la mejora de la salud no es suficiente motivación para ir al gimnasio o salir a correr, tal vez unas mejores relaciones sexuales también pueda ser un motivador. Un estilo de vida activo y un programa de ejercicio regular pueden ayudarle a conseguir y mantener una vida sexual satisfactoria.

Pero recuerde que el ejercicio por sí solo puede no ser suficiente si experimenta alguna disfunción. Comuníquese abiertamente con su profesional sanitario para obtener un asesoramiento individualizado.