La naturaleza proporciona muchas hierbas, plantas y alimentos que nos curan. La cúrcuma es una de las especias de curación más versátiles de todo el mundo con más de 600 beneficios para la salud confirmados experimentalmente. Esta especia india de colores brillantes ha sido un elemento básico en Oriente Medio y en la cocina del sudeste asiático. La medicina china ha utilizado la cúrcuma durante siglos y siglos. A pesar de que la cúrcuma ha ganando popularidad en occidente en los últimos años, ésta se ha estado usando a lo largo de la historia.
Cuando se examina la planta de la cúrcuma, nos encontramos con que se compone de curcuminoides. La curcumina podría argumentarse como el componente más importante de la cúrcuma. La curcumina es comúnmente conocida por dar al curry su color amarillo. Es por eso que la cúrcuma se puede utilizar en muchas recetas de sopas y como adobo para carnes o simplemente espolvoreándola sobre verduras. Con un sabor suave, esta especia hace que sea una fácil adición a cualquier dieta.
Las propiedades antioxidantes de la cúrcuma reducen el daño que los radicales libres hacen en el cuerpo y alivian la inflamación, dicen desde la Universidad de Maryland Medical Center. Estudios realizados en la Universidad de Arizona han sugerido que la adición de cúrcuma en las dietas de ratas de laboratorio redujo significativamente los síntomas de las personas que sufren de artritis reumatoide. Esta es una gran noticia para las personas que sufren de dolor en las articulaciones, ya que además de efectivo funciona con rapidez.
Es tan eficaz que coincide con algunos fármacos anti-inflamatorios en el mercado. De ese modo, la curcumina es un gran remedio contra los radicales libres. los bloquea directamente, y a continuación, estimula los mecanismos antioxidantes propios del organismo.
La inflamación crónica de bajo nivel se sabe que juega un papel en casi todas las enfermedades crónicas. Esto incluye enfermedades del corazón, cáncer, síndrome metabólico, enfermedad de Alzheimer y otras enfermedades degenerativas.
Recientemente, los médicos de UCLA (Universidad de California en Los Ángeles) encontraron que la curcumina podría bloquear la enzima que promueve el crecimiento del cáncer de cabeza y cuello, inhibiendo y previniendo la propagación de las células malignas. La curcumina trabaja para estimular la hormona de crecimiento de Factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF). Los pacientes de Alzheimer han disminuido los niveles de BDNF. El aumento de la curcumina en la dieta puede ser eficaz en la disminución y, posiblemente, revierte muchas enfermedades relacionadas con el cerebro. También podría mejorar la memoria y la función cerebral.
Con el tiempo, la curcumina mejora el endotelio, que es el revestimiento de los vasos sanguíneos y el principal impulsor de la enfermedad cardíaca. El endotelio regula la presión sanguínea, la coagulación de la sangre y otros factores en el funcionamiento óptimo del cuerpo.
Los ensayos controlados aleatorios realizados por el Departamento de Farmacología de la Facultad de Medicina de Gobierno en la India han encontrado que cuando se trata del tratamiento de la depresión, la cúrcuma produce efectos antidepresivos en el cerebro, aumentando los niveles de neurotransmisores en el cerebro, que se sabe que causan la depresión.
Esta especia es tan beneficiosa para nuestro cuerpo que deberíamos incorporarla en nuestra rutina diaria, ya sea a través de suplementos o añadiéndola a nuestras comidas. A continuación le dejamos un té fácil de hacer que puede ser un sustituto para el café de la mañana o para añadir algo de sabor por la tarde.
Té de cúrcuma
Ingredientes necesarios:
- 1 taza de leche de coco (o leche de almendras)
- 1/2 cucharadita de canela
- 1/2 cucharadita de cúrcuma
- 1/8 cucharadita de nuez moscada
- Una pizca de pimienta de cayena
- Miel al gusto
Modo de preparación:
- Ponga la leche de coco, las especias y la miel en una cacerola y calentar lentamente a fuego lento. Si lo pone a fuego alto la leche de coco se hará demasiada espesa. Verter y disfrutar.
- Esta receta es para una ración. Modificar los ingredientes para el número de personas a servir.