Un narcisista es más que sólo vanidad. Los narcisistas tienen una necesidad imperiosa de admiración y falta de empatía por los demás. Tienen un sentido grandioso de su propia importancia y se consideran así mismos como la prioridad número uno. Exageran sus logros, buscan la admiración excesiva y se consideran mejores y más importantes que otras personas.
Puede que conozca a alguien que es un narcisista. Puede que incluso mantenga una relación con uno. Los narcisistas son profesionales de la manipulación, por lo que puede tomar tiempo verlos como realmente son. Su sentido del derecho y la falta de empatía por los demás provocan una actitud arrogante, pero pueden ocultar su verdadero yo cuando quieren. Sus habilidades maestras de manipulación les permiten engañar a los demás y constantemente juegan las cartas con el papel de víctima.
Reconocer los rasgos de un narcisista puede ayudar a protegerse de que le hagan daño y de ser manipulados. Aquí hay cuatro cosas que los narcisistas hacen para ser el centro de atención:
1. Los narcisistas culpan a los demás
Los narcisistas nunca admitirán que están equivocados. Se pondrán a la defensiva en cualquier situación y pasan la culpa a todo aquel que pueden. Interrogan buscando posibles fallos y le harán preguntarte de si realmente es su culpa. Cuando intenta defenderse a sí mismo, el narcisista cambiará sus palabras y le dirá que nunca se hace usted responsable de sus acciones.
2. Los narcisistas interrumpen
Un narcisista quiere ser el centro de atención en todo momento. Si el tema no trata de ellos, interrumpirán e intentarán reorientar la conversación de nuevo hacia ellos. No tienen ningún interés en escuchar a otra persona, porque realmente no se preocupan por otras personas. Los narcisistas quieren dominar constantemente la conversación. Se sienten obligados a hablar de sí mismos delante de los demás y exageran sus logros. Si otra persona en la conversación no coopera con ellos, el narcisista las percibe inmediatamente como una amenaza a tratar.
3. Los narcisistas intimidan
Un narcisista utiliza la intimidación para manipular sus sentimientos de la forma en que ellos quieren que se sienta. Su objetivo es confundir o intimidar a su víctima para que acepten o cedan. Los narcisistas acosan hasta la sumisión, para bajar sus defensas y finalmente ceder. Cuando finalmente se renuncia o se admite que tienen razón, habrán tenido éxito. Los narcisistas son extremadamente competitivos. Tratan a todo como una situación de ganar o perder, y no les gusta perder.
4. Los narcisistas juegan a ser la víctima
Un narcisista es un maestro de la manipulación, pero nunca le dejará ver eso. En su lugar van a jugar constantemente a ser la víctima de cada situación. Un narcisista a menudo puede ser difícil de detectar debido a que saben cómo ser simpáticos y encantadores. Sin embargo, ellos buscan la compasión de todos y que les escuchen. Ellos ven la empatía como una poderosa herramienta que pueden utilizar para tomar ventaja de otras personas y conseguir lo que quieren. Cuando finalmente hieren a alguien, jugarán a ser la víctima una vez más y usarán la manipulación para culpar a otros.