Causas del síndrome de las piernas inquietas
- Genética
- Anemia o deficiencia de hierro
- Otras deficiencias de nutrientes, incluyendo magnesio o folato
- Venas varicosas
- Afecciones médicas crónicas que afectan a los riñones o los pulmones
- Embarazo
- Uso de medicamentos que contengan estrógeno
- Trastornos autoinmunitarios o diabetes
- TDAH
- Trastornos cognitivos, incluyendo la enfermedad de Parkinson
Síntomas del síndrome de las piernas inquietas
- Sensaciones en las piernas que se describen como inquietas, nerviosas, temblorosas, ardientes o dolorosas.
- Un fuerte impulso o sensación de que necesita rascarse, moverse, menearse o estirar las piernas inmediatamente para hacer que las sensaciones se detengan.
- Alivio temporal de los síntomas al mover las piernas
- Tics y sacudidas involuntarias en las piernas, similares a un calambre
- Dormir mal debido a sentirse incómodo y despertarse con frecuencia
Tratamiento del síndrome de las piernas inquietas
1. Llevar una dieta saludable
Las deficiencias nutricionales se consideran un factor de riesgo para el síndrome de las piernas inquietas. Para ayudar a prevenir una deficiencia, es importante llevar una dieta saludable y bien balanceada
Los alimentos para el tratamiento del síndrome de las piernas inquietas incluyen:
- Alimentos que contienen magnesio, potasio y calcio, como verduras de hoja verde, aguacate, alubias, plátanos, batatas, nueces y semillas.
- Alimentos que ayudan a equilibrar los niveles de azúcar en la sangre como la avena, la quinoa, el alforfón y el arroz silvestre.
- Grasas saludables que disminuyen la inflamación, incluyendo aceite de coco, aceite de oliva, aguacate, nueces y semillas.
Los alimentos que pueden empeorar el síndrome de las piernas inquietas incluyen:
- Añadir azúcar o edulcorantes artificiales
- Bebidas con cafeína y alcohol
- Grasas trans o aceites refinados
- Carbohidratos y granos procesados
2. Consumir suficiente hierro
Una deficiencia de hierro puede ser la causa fundamental del síndrome de las piernas inquietas. Asegúrese de consumir muchos alimentos ricos en hierro y vitaminas B, incluyendo folato. Tome un suplemento multivitamínico que incluya vitaminas B y hierro como tratamiento para el síndrome de las piernas inquietas o agregue alimentos ricos en hierro a su dieta. Los alimentos ricos en hierro que pueden ayudar en el tratamiento del síndrome de las piernas inquietas incluyen espirulina, lentejas, espinacas, chocolate negro, frijoles negros, pistachos y pasas.
3. Tome baños tibios de sal Epsom
Los remedios caseros para el síndrome de piernas inquietas incluyen baños de sales de Epsom. La sal de Epsom es un antiinflamatorio natural que puede ayudar a aliviar los músculos y reducir los espasmos. Añada 1-2 tazas de sal Epsom al agua tibia del baño y sumérjase en el baño durante al menos 20 minutos como tratamiento para el síndrome de las piernas inquietas.
4. Use aceites esenciales y terapia de masajes
Varios aceites esenciales pueden ser usados como remedios caseros para el síndrome de piernas inquietas. Los aceites esenciales de ciprés, romero, lavanda y cedro tienen cualidades antiespasmódicas naturales que pueden ayudar a detener espasmos, calambres y dolores musculares. Aplique estos aceites esenciales en las zonas afectadas de las piernas antes de acostarse. Los remedios efectivos para el síndrome de piernas inquietas también incluyen la terapia de masaje. Los masajes regulares pueden ayudar a calmar las áreas dolorosas y estimular la circulación para prevenir los espasmos musculares.
5. Ejercicio y estiramiento
Ciertos estiramientos y ejercicios pueden funcionar como remedios caseros para aliviar el dolor y otros síntomas. Un estudio de 2006 encontró que una combinación de ejercicios aeróbicos moderados y un entrenamiento de resistencia corporal inferior ayudó a reducir significativamente la gravedad de los síntomas cuando se realizaron al menos tres veces por semana. Los estiramientos que funcionan como remedios para el síndrome de las piernas inquietas incluyen:
- Elongaciones de pantorrillas, como la respiración pulmonar
- Flexión hacia adelante para estirar los tendones isquiotibiales
- Estiramientos al estar de pie sobre una pierna, doblando la otra pierna y tirando de ella detrás de ti.
- Estiramientos de cadera realizados al sentarse en el suelo con las piernas dobladas y abiertas como un libro.
- Levantarse y mover las piernas después de haber estado sentado durante mucho tiempo
6. Priorizar la gestión del sueño y el estrés
El síndrome de las piernas inquietas puede aumentar su riesgo de insomnio, estrés crónico y fatiga. Cumplir con una rutina constante a la hora de acostarse puede ayudar a reducir los problemas de sueño. Los remedios para el síndrome de las piernas inquietas para ayudarle a dormir mejor por la noche y reducir el estrés incluyen:
- Evitar la electrónica varias horas después de acostarse
- Hacer ejercicio durante el día para sentirse más cansado por la noche
- Estirarse y hacer yoga
- Tomar baños o duchas calientes
- Masajear las piernas
- Técnicas de respiración profunda y relajación corporal
- Medicación y oración
- Escribir en un diario
- Leer algo relajante