El microbioma intestinal o el equilibrio de los microorganismos en el tracto intestinal ha estado en las noticias de la salud con mucha frecuencia últimamente, con información no sólo relacionada con la salud digestiva, si no también con trastornos del humor, peso, problemas de la piel, y afecciones autoinmunes.
Desafortunadamente, la combinación de una mala dieta, el uso excesivo de antibióticos, el uso de productos anti-bacterianos, y la falta de alimentos fermentados regulares en nuestra dieta ha creado una tormenta perfecta para el desequilibrio en el microbioma intestinal.
10 síntomas de que usted puede tener un desequilibrio intestinal
- Problemas digestivos: intestino irritable, hinchazón, dolor abdominal, indigestión, mal aliento, estreñimiento o diarrea.
- Alergias
- Antojos de azúcar
- Infecciones por levaduras
- Aumento de peso
- Acné, eczema, psoriasis o urticaria
- Dolor en las articulaciones
- Depresión
- Dificultades para el aprendizaje o de comportamiento
- Confusión mental
Implicaciones importantes de un microbioma intestinal desequilibrado
Inflamación
Demasiadas bacterias dañinas u otros organismos pueden crear una inflamación importante en el cuerpo, dando lugar a dolores en las articulaciones y dolores en el cuerpo, trastornos de la piel e incluso enfermedad autoinmune.
Aumento de peso
Un microbioma saludable es la clave para perder peso. Muchos estudios recientes han demostrado que reequilibrando el microbioma, puede cambiar su metabolismo.
Salud emocional
Si su microbioma está desequilibrado, usted será más propenso a experimentar ansiedad y depresión, así como fatiga y confusión mental. ¡Es bastante sorprendente el alcance de sus efectos! De manera similar, el estrés puede afectar a su microbioma de una manera negativa también, con impactos duraderos en su estado de ánimo, la digestión y la salud en general.
Cómo puede corregir un desequilibrio en el microbioma intestinal
1. Probióticos
Estas son las bacterias saludables que ayudan a equilibrar el microbioma. Los probióticos pueden venir en forma de suplemento (cápsulas o en polvo) o en los alimentos fermentados de forma natural tales como chucrut, yogur, kéfir, kombucha, verduras encurtidas o kimchi.
2. Prebióticos
Estos son los alimentos que alimentan a las bacterias saludables de su tracto gastrointestinal y que contienen fibra, inulina, y arabinogalactanos. Los alimentos prebióticos incluyen alcachofas, ajo, judias, cebollas, espárragos, zanahorias, puerros y okra.
3. Suplementos antimicrobianos
En la mayoría de los casos, el simple aumento de los probióticos y prebióticos todavía no es suficiente. También se necesita el uso de hierbas antimicrobianas y suplementos para acabar con los organismos patógenos (levaduras, bacterias o parásitos).
Los siguientes alimentos los pueden incluir:
- Ajo
- Orégano
- Berberina
- Extracto de semilla de pomelo
- Ácido caprílico
- Extracto de hoja de olivo
- Uva Ursi
4. Reducción al mínimo de azúcar y todos los alimentos hechos con harina
Muchos organismos patógenos o ‘bichos malos’ prosperan con una dieta alta en azúcar y carbohidratos refinados. La reducción al mínimo de estos alimentos es un paso esencial para reequilibrar su microbioma, y ninguna cantidad de probióticos lo podrá compensar.
En conclusión, si se sospecha de que puede haber un desequilibrio en su microbioma intestinal, hay muchos pasos que puede tomar para restablecer el equilibrio. ¡Se sorprendería por el gran alcance e impacto que un intestino sano puede tener!