Cuando tu nariz está taponada y comienza la tos, la mayoría de personas no están para pensar cosas ingeniosas. Simplemente tragas las medicinas y las soluciones específicas, te frotas con ungüentos en la piel, y pruebas todo lo que los anuncios reclaman como un éxito.
Pero gracias a esta pequeña guía, no tendrás que hacer nada de eso. Estas pastillas para la tos contienen todos los ingredientes importantes para matar a cualquier resfriado o gripe.
Necesitamos:
- 225 gr. de azúcar
- 125 ml. de agua
- 1 cucharada de zumo de limón recién exprimido
- 1 cucharada de miel
- 1/2 cucharada de jengibre molido
- 1/4 cucharada de clavo molido
En primer lugar, se mezclan todos los ingredientes en una olla y se deja hervir. La miel es un anti-inflamatorio, el jengibre fortalece el sistema inmunológico, y los clavos son un anti-oxidante. Juntos, proporcionan una defensa perfecta. Una vez que la mezcla ha llegado a hervir, se deja que hierva a fuego lento durante otros 20 minutos, revolviendo con frecuencia.
A continuación, deja la olla a un lado para que se enfrie un poco. El azúcar debería haberse caramelizado, lo que hará que la sustancia sea espesa y de consistencia pegajosa.
Usa una cuchara para distribuir pequeñas gotas en una hoja de papel de horno. Después espera hasta que las gotas se queden duras.
A continuación, espolvorea un poco de azúcar glas por encima. Esto asegura que las pastillas para la tos no se peguen.
¡Hecho! Ahora tienes unas pastillas geniales para la tos a mano para cualquier emergencia. Estas pastillas también se pueden poner en agua caliente, donde pronto se convierten en un delicioso té. ¡Mejorate pronto!
Aquí está el vídeo con las instrucciones (en inglés, pero son muy sencillas):
Lo mejor es que están hechas en casa y puedes estar 100% seguro de lo que hay en ellas.